Sunday, August 23, 2015

@SoyFloresSolano Un tren de arte que salpica pura luz


@SoyFloresSolano Un tren de arte que salpica pura luz
Joaquín Ortega

El arte contemporáneo venezolano bebe del mundo, de su pasado, de sus propias noches y temores. Posiblemente, no exista un artista que no haya abandonado alguna obra, para retomarla luego, desde su boceto o sus cenizas, y así, incorporándola a su corpus -o desmantelándola para siempre- cierre el capítulo de sus propios aislamientos.

La fragilidad de la naturaleza cultural criolla –sometida, tanto a la incursión de los nuevos salvajes del poder, como a los contados circuitos, donde el respeto al creador y la pasión por la distribución, comparten cuarto con el vampirismo y el cotilleo más ramplón- hace de lo punzante algo necesario, y de lo simple, algo consumible.

En este contexto el color, la luminosidad, la forma y la bondad natural de la propuesta de Soy Flóres Soláno -y “el sangrismo”- abren un boquete en la pared, por donde, hasta el menos curioso, se pone de puntillas para ver de cerca.

JO: ¿El arte puede… o tiene algo que decir en estos días?

SFS: Todavía lo puede, hoy más que nunca el arte como mecanismo de sensibilización humana tiene una responsabilidad  innegable. Nunca antes las creaciones artísticas habían sido vistas en tantos sitios apartados, del origen de la misma… ni habían llegado a tantas personas en tan poco tiempo… nunca antes los artistas habían estado tan cerca de los espectadores, nunca había sido tan estrecha esa relación y, hoy día, es una realidad irreversible. Si no usamos ese poder para cambiar el curso de la historia, hacia un sendero más luminoso, habremos desperdiciado nuestra hora. Es momento de evocar un segundo renacimiento y nadie me quitará esa idea de la cabeza.

JO: ¿Dónde termina el arte y dónde comienza la estafa?

SFS: El arte termina cuando el creador renuncia a su curiosidad interior  y se entrega a la flojera complaciente. Es ahí donde surge la estafa, vendida siempre a altos precios.

JO: los soportes, las técnicas, los materiales que mejor te describen y utilizas…  

SFS: Pintura acrílica sobre lienzo,  madera o cartón…. lápices, marcadores, tinta china, para ilustrar sobre papel, opalina o sobre sketchbooks. También, me valgo del ordenador, del scanner y de un BombooPad,  para profundizar el resultado digital de las ilustraciones que hice sobre papel.

Es de modernos no apretujar carbohidratos con proteínas. Es de modernos no agrietar el pupitre con la punta de metal de un compás.  Es de modernos no facturar. Es de modernos no coronar gatos en sus fotos. Es de modernos no brincar sobre la ropa recién lavada. Es de modernos no disimular el sueño. Es de modernos coleccionar latas viejas con monedas nuevas. Es de modernos refrescarse con desnudos aparentes. Es de modernos rasgar pequeños trozos de tela nueva. Es de modernos reparar lo que no se ha roto. Es de modernos casar a sus hijos con gente que no acepta desayunos. Es de modernos admitir que el papel Bond es una ciencia muerta. Es de modernos hablar con el ladrón de su correspondencia. Es de modernos el mareo de la sal, del azúcar, del licor y del monte. Es de modernos el calambre programado. Es de modernos voltear un cubo de tornillos sobre la cama.  

JO: ¿cuánto arriesgas como artista al hacer una propuesta honesta?

SFS: Entre más se arriesgue por ser honesto y auténtico en una obra, mayor será el impacto que se genere en la memoria de los que están afuera… observando… contemplando y compartiendo. No hay que temer por ser quien quieras ser. Cuando entendí la magnitud de mi tarea en esta vida, no dudé en lanzarme sin paracaídas hacia mis abismos internos. Asumí el riesgo y lo que encontré es lo que he estado dando a conocer en mis obras. Los riesgos grandes valen la pena, un ejemplo, es que gracias a eso estoy aquí respondiendo tus preguntas.

JO: ¿Cuáles sientes que son tus influencias…personajes, artistas, escritores, músicos?

SFS: Lucian Freud, Francis Bacon,  Egon Schiele, Yucef Merhi, Arturo Uslar Pietri,  Isaac Asimov, Jiddu Krishnamurti y Kanye West.

JO: Considera tres obras en Venezuela, y tras de ellas, tres artistas que te signifiquen, profundamente algo…

SFS: Reunión con un círculo rojo, de Jacobo Borges; me mostró una temprana revelación sangrista. Nocturno, de Francisco Bugallo; me mostró la implacable seducción de la oscuridad en la mujer. El niño enfermo, de Arturo Michelena; me mostró el poder de una obra maestra, hecha por un venezolano de 23 años.

Es de modernos no casarse. Es de modernos no abrir la puerta sin un cigarrillo en la boca. Es de modernos no llevar pan a la casa. Es de modernos no subir en ascensor. Es de modernos no jugar a la lotería. Es de modernos no ocultar la tos. Es de modernos guardar dinero en una media. Es de modernos abanicarse con Long Play. Es de modernos romper huevos con una mano. Es de modernos hacer círculos, al lado de los otros, con vasos repletos de hielo. Es de modernos subir a la azotea a lanzar papeles rotos hacia abajo. Es de modernos apilar los libros con el lomo hacia la pared. Es de modernos el dolor de espalda. Es de modernos el cansancio vespertino. Es de modernos el insomnio programado. Es de modernos mirar una botella de vino tinto al sol.  

JO: ¿con quién te has relacionado mejor al momento de trabajar en dupla o en equipo...alguna plataforma web, una banda, un proyecto musical solitario? 

SFS: Con el pintor Eduardo Pereira, de nuestra unión han surgido grandes descubrimientos, uno de ellos es la iniciativa llamada “Los Primarios”, en donde logramos pintar lienzos en vivo, frente a una audiencia, durante distintos eventos.

JO: ¿Qué se puede decir del sangrismo?

SFS: El sangrismo es una antorcha que emerge de las profundidades más oscuras y turbulentas de la realidad social venezolana. Aparece para dar lumbre… que sea capaz de mostrarnos lo que realmente somos y podemos ser. El sangrismo es como una criatura que permaneció dormida durante mucho tiempo, y que algunos pocos estamos buscando despertar… con la ayuda de rituales creativos en forma de cuadros, canciones o poemas. Dicha criatura no es un monstruo, el verdadero monstruo es el temor, la estupidez y la confusión que reina  nuestros días. Yo, Flóres Soláno exploro el sangrismo desde el amor a la mujer y la condición humana.

JO: ¿qué queda por destruir...que queda por construir?

SFS: Por destruir, el temor. Por construir, el segundo renacimiento.

JO: ¿Habrá algo que salve al mundo?

SFS: Todos sabemos que el mundo está bastante jodido, sólo te diré, que el arte abrirá las puertas del infierno para sacar un poco de luz, y así evitar que la oscuridad, se lo termine de tragar todo.

JO: Un par de mundos alternos que quisieras crear…

SFS: Un mundo donde no existe el dinero. Un mundo donde no existe el reloj.

JO: un libro inevitable…

SFS: 1984 de George Orwell, es mi distopía predilecta, de la cual emanan poderosas reflexiones...

JO: ¿qué borrarías de tu memoria, de ser posible y de quererlo, claro está?

SFS: Nada, todo en esta vida mía, ha sido resultado de mis pensamientos. Y eso es una delicia.

Es de modernos casar a sus hijos con gente que no aceptan sus desayunos. Es de modernos admitir que el papel Bond es una ciencia muerta. Es de modernos hablar con el ladrón de su correspondencia. Es de modernos subir a la azotea a lanzar papeles rotos hacia abajo. Es de modernos apilar los libros con el lomo hacia la pared. Es de modernos el dolor de espalda. Es de modernos…

Para conocer más de la obra de @SoyFloresSolano (Caracas, 1988) artista plástico venezolano, síguelo en Twitter, Facebook, Tumblr, Instagram y Weebly. Siempre con el acento en la “o” de Flóres y en la “a” de Soláno. Su trabajo combina distintas expresiones y escenarios: música, ilustraciones, posters, portadas de discos y videos.








1 comment:

Brittany Hunt said...

Awesome bllog you have here