Wednesday, April 20, 2011

Diario de un jodedor: Astrología TV



Diario de un jodedor: Astrología TV

Joaquín Ortega

La astrología se ha vuelto la segunda piel del fracaso. Si no pegan la predicción le echan la culpa a algún astro relancino. Si algo pasa mucho después, dicen que ellos lo previeron, pero con otras palabras. Entre eventos retrasados, inventos de embustero crónico y refacciones al lenguaje cifrado son los reyes del verbo adolescente.

En televisión no sabemos si los requisitos para tener un programa de brujería new age deben ser el amaneramiento y la desaparición de la dicción. Mientras peor trates al castellano, mejor. Mientras más escaras tengas en el rostro te vas ganando check list positivos en producción. Mientras menos idea tengas de hacia cuál cámara ver, más cesta tickets le agregan a tu salario.

¿Los astrólogos prime time hacen el curso de modulación de Sergio Novelli? ¿Carlos Croes les graba ejemplos para farfullar en MP3? ¿Balbucir es una materia de valor curricular? Si The King´s Speech se hubiese hecho en Venezuela las misses serían sus coristas y los créditos saldrían tosidos desde la pantalla.

Decir a cada rato “una nueva novedad” –caso arquitecto de sueños- o recibir supuestos mensajes del más allá de un pana: “el Ángel Gabriel” -cuyo mayor éxito previo, debió haber sido arreglar la cartelera de la maestra Rosa en la Unidad Escolar Jesús Soto Rojas de Uracoa- nos alertan sobre el peligro, no ya sólo de los intentos de redondeo de arepa de unos simuladores de la prosperidad, sino del seso que va perdiendo la gente cuando la pelazón apremia.

Con un ejercicio mínimo de memoria usted se dará cuenta, que lo que le dicen a un signo hoy, se lo dirán a otro mañana; que cada adornito que sacan para abrirle los caminos debe ser “adquerido” en algún bazar de condones al que le hacen la cuña; que cada vez que le dicen en vivo que “alguien muerto que está aquí con usted, le tiene que decir algo que no le pudo decir”, lo que necesitan es cinco minutos de su llanto porque “eso vende”. Si usted deja la caña y se para temprano y trabaja, si deja la gastadera en brujería e invierte aunque sea en un curso de mecanografía, seguro cambiará su suerte.

Fíjese en el destino de los mayoristas de quimeras: Hermes, el iluminado, un candidato a gobernador arruinado que no pega ni el dato de un caballo por radio. Adriana Azzi, en un canal en República Dominicana, donde los anunciantes más importantes son señoras que hacen tortas. Los timadores quedan para las líneas calientes y las lecturas de cartas para quinceañeras con la regla. Haga memoria, ¿dónde está aquel viejo hediondo a pipí de gato que decretó la muerte de Caldera? ¿En cuál kiosco vendiendo lotería verá a las brujas de los canales regionales? Siga creyéndole a cuanta plumífera y diva cucú vea en TV y pregúntese por qué no consigue un trabajo. ¿No será porque en vez de estar en la calle metiendo curriculum, está todo el día frente al TV y empantuflado?

Consultorio

Querido Joaquín. Soy una hermosísima joven guatireña que aprendió a bailar en locales de carne en vara de los Valles del Tuy. A pesar de mi corta edad -18 añitos recién cumplidos- he sido la luz de los ojos de varios pulcros, aunque un poco seniles abuelitos dueños de fincas, ganado, gandolas y containers. Ahora, hay algo que me angustia, a pesar de haberles contado todos mis sueños de baile profesional, frente a un escenario -de dimensiones mayores al de los jacuzzis con tubos de ciertos cuartos de hotel- ellos insisten en que yo debo dejar el baile y dedicarme más bien a embellecer mi cuerpo. Yo, creo que tienen razón y por eso me mandé a volar los seis dientes que me quedaban sanos y ahora uso una plancha dorada de quita y pon que es un sol. Mis papis –así les digo a mis señores que me compran cosas finas- también me sufragaron la operación de relleno de nalgas y teticas. Ahora, sí soy la María Lionza que ellos quieren. También me reconstruí el himen para darle una sorpresita a Don Rolando Abreu que tiene 97 años y gusta de mí desde que me botaba el pañal por la ventana. En fin, mi problema es cómo decirle a mis papis que quiero unas clases de batitubo que están dictando en los sótanos de Parque Central. ¡Oh tu sabio paladín del rock y las franelas con calaveras! Ayúdame ahí.

R: Querida apéndice de automóvil tuneado. Según la mitología griega Frixo y Hele huyeron de la muerte gracias a las bondades de Zeus y en especial a la ayuda del vellocino de oro. La madrastra de los niños, se llamaba Ino y quería quedarse sola con el papá de los pelados. Este pana era un bichito que se llamaba Atamante. Ixo se salva, Hele muere y el chamo sacrifica al vellocino en honor a Zeus. A Zeus le da cosita y convierte en constelación al carnero. Fin del cuento. Yo te recomiendo que dejes de afeitarte la cortadita, porque ese vellocino peludo es el que puede encontrar cualquier señor de la edad de los que te mantienen. Luego hablamos de conseguirte una pensión en un circo de Centro América.

2 comments:

Laura M said...

Lamentablemente tienes razón. Con lo único que no estoy de acuerdo es con la crítica a Jose Bernardo. Todos tenemos malos momentos en la vida.
Es un post para reflexionar sobre este oficio en decadencia crónica y del cual cada vez me siento menos orgullosa de pertenecer. Los primeros responsables: los astrólogos.

Joaquín Ortega said...

Gracias por y opinion Laura
como puedes ver es un blog de humor
José Bernardo tío de un gran amigo tenía un gran sentido del humor...lo entrevisté un par de veces en radio hace un buen tiempo..
no sé si está vivo, por cierto
al final, como decía la cancion "la cultura popular tiene amigos a montones pero en ella se colean los zorros y camaleones"
así q hay de todo
saludos, gracias por leerme y feliz tarde
J